Fernando, el niño de 5 años al que su mamá le saco los ojos por parte de un ritual, este fuera de peligro.
Luego de haberse debatido entre
la vida y la muerte, Fernandito se encuentra consciente y fuera de peligro. Él recibirá educación especial, dada su
condición.
Además, el niño recibirá atención
psicológica para ayudarle a asimilar la noticia de que su mamá fue quien le quito los ojos sin que tenga un impacto fuerte
en él.
Los médicos habían informado que
Fernando no tenía el globo ocular del lado izquierdo mientras que el del lado
derecho sí se encontraba pero de fuera.
Con anterioridad se había
reportado que el menor se mantenía estable pero que debido a las lesiones, no
iba a recuperar la vista.
O'shea Cuevas dijo que en unos
años se le insertarán unas prótesis con fines estéticos.
Fernando perdió los ojos como
víctima de un rito en el que participaban, entre otras personas, su mamá y su
tía. El niño se negó a cerrar los ojos, como le habían pedido, tras lo cual su
madre y tía procedieron a extraerle los ojos.
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